domingo, 30 de noviembre de 2008

Microdrives (3)

 




A principios de 1984, Sinclair dio a conocer que habían sido vendidas menos de 1.000 unidades Microdrive (incluyendo las nuevas del Sinclair QL) y, aunque aparecieron un par de aplicaciones que habían sido adaptadas para hacer uso de este sistema en almacenamiento de datos, para la mayoría de los desarrolladores de juegos la tecnología era demasiado cara: los jóvenes jugadores, que eran sus clientes, no tenían dinero suficiente en sus bolsillos. Por supuesto, esto ayudó a limitar el número de juegos disponibles en Microdrive. A principios de 1985, Sinclair baja estrepitosamente el precio de los cartuchos a 1,99 £ con el fin de ponerlos en línea con los precios de los disquetes.





Sinclair QL queda suspendido de producción en 1985 para ahorrar dinero (la compañía admitió una pérdida de 18,3 millones de libras). Cuando Amstrad adquirió la empresa en crisis en 1986 por 5.000.000 £, se dejó de lado a la QL y a los microdrives. Amstrad estaba interesada en el formato de disco de 3 pulgadas que había comprado en Asia para su nuevo equipo orientado a eliminar las máquinas de escribir de los escritorios, el PCW8256, y quiso extenderlo, además, a otras máquinas para lograr precios más bajos a través de mayores volúmenes de compra, haciendo crecer así la base de usuarios. Así pues, Amstrad se cargó el polémico Microdrive de un plumazo.





El hecho de que el Sinclair ZX Microdrive pueda haber sido, pues, una especie de callejón sin salida en la evolución del almacenamiento de datos, no resta valor a la novedad tecnológica, ni a los esfuerzos de quienes trabajaron en ello, ilusionados, para convertirlo en un sistema de almacenamiento comercial viable para las computadoras 8 bits. El tiempo los almacenará en su justa estantería de honor, junto a su hermano mayor, ZX Spectrum.



domingo, 23 de noviembre de 2008

Microdrives (2)

 




Los primeros Microdrives salieron al mercado con chips EPROM con el objeto de que pudieran ser actualizados con nuevo código posteriormente. Y es que Sinclair quería rediseñar la placa de circuitos en algún momento, y la grabación de un chip ROM definitivo tendría lugar sólo cuando se hubieran dado por depurados algunos errores en el código vigente con el que en ese momento salió a la venta el dispositivo. Rápidamente se supo que había otros problemas añadidos también. La velocidad era la cuestión principal, y también el uso regular de las unidades que revelaría los puntos débiles del diseño.

Mecanismo del cabezal de Microdrive (clic para ampliar)


Como todos los medios basados en una cinta magnética muy estrecha y delgada, los Microdrives acumulaban partículas del material de óxido magnético, un problema exacerbado por la necesidad de tirar de la cinta de 2 mm de ancho y la fricción adicional que ello inducía. La cinta se movía envuelta en una rueda de goma en el interior del pequeño cartucho, manteniéndola entre ella y una ruedita  de plástico. Al encender la unidad, la velocidad de la cinta sobre la cabeza lectora pasaba de 0 a 750 mm por segundo, implicando un gran tirón que llevaba a un estiramiento de la cinta a punto que, comúnmente, se descentraba de su paso entre las ruedas del mecanismo. Versiones posteriores de la unidad incorporaron un condensador de 22µF para permitir al motor llegar a la velocidad de funcionamiento completo más paulatinamente y sin tantos problemas.





Incluso Sinclair, en el propio manual del dispositivo, tuvo que admitir que “los cartuchos de Microdrive no durarán para siempre y, con el tiempo, tendrán que ser reemplazados. El síntoma de envejecimiento de un cartucho es que el equipo invierte más tiempo y más tiempo para encontrar un archivo antes de cargarlo. Así que resultaba buena idea mantener copias de seguridad de los programas y archivos importantes en otro cartucho o en una cinta”. 





Mientras que las unidades de Microdrive costaban 49,95 £, lo cual era considerado como muy barato, con los cartuchos de repuesto ocurría todo lo contrario, pues salían por 4,95 £ cada uno, y eso es alrededor de tres veces el precio de un disquete de 5,25 pulgadas del momento. Además, la capacidad de almacenamiento, que se dijo inicialmente que iba a ser de 100 KB, se había convertido durante la publicidad de lanzamiento en “no menos de 85 KB“, para permitir las pérdidas por pequeñas diferencias en la longitud de la cinta de diferentes cartuchos, por motores funcionando a velocidades ligeramente diferentes en diferentes unidades y, en menor medida, por los sectores defectuosos en la cinta.




domingo, 16 de noviembre de 2008

Microdrives (1)

 




En el lanzamiento del ZX Spectrum, que tuvo lugar el primer día de la Earl’s Court Computer Fair de 1982, Sinclair presentó el prototipo de ZX Microdrive a los periodistas reunidos allí junto a una breve descripción de las capacidades prometidas del dispositivo. Muchos quedaron impresionados. El semanal ‘Popular Computing’ llegó a decir que “tal vez es el mejor conejo que Clive ha sacado de su chistera de mago. Se trata de una unidad de disco muy pequeña que utiliza dos disquetes de un cuarto de pulgada, con una capacidad por cada disquete de 100 KB y una tasa de transferencia de 16 KB por segundo. Además, podremos conectar hasta ocho de estas unidades a una ZX Spectrum. Y todo ello a un precio de 50 libras esterlinas“.


Por aquel momento ya se rumoreaba que el Microdrive no estaba basado en tecnología de disco rotatorio. Parecía que, en lugar de ello, se utilizaría un rollo de cinta de alta velocidad, como apuntaba la revista británica ‘Your Computer’. De hecho, la publicación añade que, probablemente, las unidades de Microdrive ya estaban pensadas así desde hace mucho antes.
Cada cartucho Microdrive (de 43 × 30 × 5 mm) no contenía un disco dentro, sino un bucle o rollo de cinta magnética de 2 mm de ancho y fabricada (y en esto Sinclair fue tajante e insistente) con los mismos materiales que la cinta de vídeo de alta calidad, y no con lo que te encontrarías dentro de un casete de audio normal y corriente. Aún así, bastantes fueron aquellos que acusaron a Sinclair de mentir en un primer momento y de vender humo, pues su Spectrum parecía estar condenado a utilizar unidades de cinta de por vida; llámalo cassette, llámalo Microdrive.



David Southward, supervisor de desarrollo de periféricos de Sinclair Research quedó a cargo del proyecto Microdrive en 1982 junto  al ingeniero electrónico Ben Cheese. Rick Dickinson se encargó del diseño exterior. La ZX Interface 1, la diseñó Martin Brennan, que luego trabajaría en la consola Jaguar de Atari. Brennan diseñó la electrónica de la interfaz y el chip ROM de la unidad, escribiendo el código por sí mismo. El diseño mecánico fue dirigido por John Williams.    





Ian Logan, un programador independiente de Lincolnshire, también escritor y médico, fue el encargado de escribir los comandos adicionales para el BASIC del Spectrum con el fin de que los usuarios pudieran interactuar con Microdrive. Dichos comandos fueron alojados en el chip ROM de 8 KB de la ZX Interface 1, por lo que parcheaban el repertorio original de comandos del ordenador cuando la interfaz se conectaba.


Esquema del circuito de Microdrive (clic para ampliar)



La participación de Logan se detalla en un libro que, en aquella época, tuvo un gran éxito, ‘The Complete Spectrum Rom Disassembly‘, escrito junto con Frank O’Hara. Logan analiza el firmware del equipo, detallando rutinas,  posición  de las tablas de salto y demás. El resultado fue un manual de referencia muy completo, no sólo para la gran demanda de aspirantes a escritores de código máquina del momento, sino también para los propios empleados de Sinclair Research, pues la compañía no ofreció un compendio de referencia tan detallado como este.


domingo, 9 de noviembre de 2008

Calculadora Sinclair President

Calculadora Sinclair President




La Sinclair President es una calculadora lanzada por Sinclair Radionics a principios de 1978. Había dos modelos, President y President Scientific. Se encontraban entre las últimas calculadoras producidas por Sinclair, y su gran tamaño contrastaba con los modelos anteriores más pequeños, como Sinclair Executive, que hizo famosa a la empresa. Los modelos President estaban relacionados con Sporting Life SETTLER , una calculadora diseñada específicamente para tiendas de apuestas.




domingo, 2 de noviembre de 2008

Calculadora Sinclair Cambridge Memory

Calculadora Sinclair Cambridge Memory




La Sinclair Cambridge era una calculadora de bolsillo presentada en agosto de 1973 por Sinclair Radionics . Estaba disponible como kit de forma de kit para ser ensamblado por el comprador o ensamblado antes de la compra. En última instancia, la gama comprendía siete modelos, el Cambridge de "cuatro funciones" original, que realizaba las cuatro funciones matemáticas básicas: suma, resta, multiplicación y división, seguido de Cambridge Scientific, Cambridge Memory, dos versiones de Cambridge Memory% , Cambridge Scientific Programmable y Cambridge Universal.








Era extremadamente pequeña para una calculadora de la época:  pesaba menos de 3,5 onzas (99 g) y su tamaño era de 50 por 111 por 28 milímetros (2,0 pulgadas × 4,4 pulgadas × 1,1 pulgadas). La energía fue suministrada por cuatro baterías AAA .  El uso de componentes baratos fue un factor importante que contribuyó al costo de la unidad. Un modo de falla común era con los contactos del interruptor, lo que hacía imposible apagar la calculadora. Debido al uso de contactos de interruptor hechos de níquel recubierto con estaño, en lugar de oro, una capa de óxido se untaría a través de la barrera aislante después de usar repetidamente el interruptor.




Los números se mostraban en la pantalla LED de 8 dígitos (fabricada por National Semiconductor) en formato científico con una mantisa de 5 dígitos y un exponente de 2 dígitos. Cambridge utilizó diodos emisores de luz para su visualización. En variantes científicas posteriores, el consumo de energía de la pantalla requería una batería PP3 más grande , lo que creaba una protuberancia en la carcasa trasera inferior del aparato.




 https://www.youtube.com/watch?v=liViiy6BFdY